El tema del lenguaje que utilicemos a la hora de ligar puede ser algo determinante para que realmente termine en éxito o en un rotundo fracaso.
Por ejemplo, si eres una persona muy técnica como por ejemplo ocurre con los médicos, los científicos o los técnicos, quizás sea una mala idea hablarle como lo harías a un “colega” de trabajo, por que quedará muy frío, impersonal y probablemente no te entienda nada.
Por ello, lo ideal será que adaptes tu lenguaje a quien estés hablando. Si es una persona que habla de manera muy técnica y de tu sector, pues será otro tema.
Pero piensa, que para la mayoría de los mortales, hablares sobre tu trabajo les sonará a chino y por lo tanto perderán la atención que te estén prestando.
Mucho mejor que les hables de cosas cotidianas o que realmente puedan entender y sobre todo de las que puedan sacar tema de conversación. ¿De que te sirve que hables sobre un tema raro y monopolices tu la conversación y la otra persona nunca termine hablando nada? Eso hará que se aburra y no quiera quedar nunca más contigo.